Social Icons

twitterfacebookgoogle pluslinkedinrss feedemail

Pages

Sangre sin sangre

Solíamos andar juntos,
todo el tiempo, tu y yo,
se hacía eterno y tan corto,
tú mi confidente,
podía expresar el crudo invierno de mi corazón,
frente a ti recibiendo toda tu atención,
más nunca una critica inmerecida,
tu mi psicólogo,
sentía que podía vaciar cualquier desvariado pensar
o atormentado sentir del corazón,
sin temor a la razón.

A un llamado, siempre ahí estabas,
cuando mas terror me acechaba,
ahí tu me calmabas y queriendo consolabas.
Cuna de miedo, de dolor,
de incomprendido estremecer, tu acurrucabas,
meciendo mi inexplicable e inmaduro actuar,
a mi corazón, paz le dabas,
arrancando de mi, sonrisas extinguidas por un quebrantado sentir,
me hacías ver que en el mundo aun esperanzas habitaban.

Pero la crueldad me zarandeo,
aquel fantasma ocultado por inconclusa careta,
sin querer te llevo,
fuiste arrancado de mi lado al azar,
prefiriendo un obtuso si, a un interesado no,
te sedujo el sabor de lo desconocido,
de mundos incomprendidos,
y hasta hace poco inexplorados,
aquel olor de nueva sensación de difamada libertad,
te conquistó,
te alejaste sin rumbo,
y fuiste borrando tus pasos del camino,
para no poder encontrarte.

Sentí haberte perdido,
que las flores del jardín que construimos,
marchitaron sin piedad,
pero conozco la base de tu corazón,
y aunque algunos sentires se difuminaron, sin desearlo,
pues tu dolor gano aquella ficticia batalla
a tu correcto actuar,
lo se bien, tu interior aunque fue maltratado,
yo se que aun sigue intacto,
déjale a tu corazón volver a su comprensión,
a su hogar, a su naturaleza, a su merecido sonreír,
devuélveme el compañero que talvez perdí.



Dedicado al único hombre en mi vida, tu mi hermano, mi mejor amigo, D.